DONDE COMER TAPAS EN TRIANA

0
Huevos fritos con patatas y virutas de jamón - Taberna Sol y Sombra

Huevos fritos con patatas y virutas de jamón - Taberna Sol y Sombra

Otoño; un día de estos que te levantas malaje, pero que el cuerpo te pide trianear para que te de un poco el fresquito en la cara y comer por Sevilla. Porque uno ya, es amante de las cosas simples, o que tenemos cierta edad, que también puede ser, para qué nos vamos a engañar, si yo nací cuando la calle Sierpes tenía hierba o cuando La Giralda era una droguería…

Arreglaíto, porque… ¿dónde se ha visto que un sevillano vaya en chándal al centro? Así no, miarma…

trianear
Sol y Sombra : Solomillo al Ajo

Vas de camino al Altozano de Triana, te santiguas como buen capillita en la Capillita del Carmen, miras a La Real Maestranza por el agujerito del pecho del Monumento a Juan Belmonte, y te da por pensar en Don José Zorrilla, en su obra Don Juan Tenorio diciendo… ¿no es verdad ángel de amor, que en esta apartada orilla más pura la luna brilla y se respira mejor? Po no se va a respirá mejó miarma, si estás en Triana

Inmediatamente después de expulsar todo el trianero que vive en mí, no se me pasa por la imaginación otra mejor idea que hacer una paraita en El Mercado de Triana, donde uno, al ver tanto buen género y un fantástico ambiente, se toma su primera Cruzcampo fresquita, evidentemente con su tapita de queso Apolonio para ir abriendo el cortejo con la cruz de guía.

[foogallery id=»1086″]

Los médicos recomiendan trianear una vez por semana

Pero el cuerpo que es sabio, nos pide barquito velero, mojar hasta la manga, pegar capotazos... y como no puede ser de otra manera, whatsapp a los amigos y quedada en la puerta del SOL Y SOMBRA en la Calle Castilla. Pasamos dentro rapidito, porque es un día de otoño de estos feos, con tanto frío que se podían guardar las croquetas en la mesita de noche.

Sin necesidad de mirar carta, fuimos a sus platos estrellas, donde se pierde el sentío, con su SOLOMILLO AL AJO y sus PATATAS FRITAS CON HUEVO FRITOS CON VIRUTITAS DE JAMÓN. Aquí muero yo, todo acompañado por un buen vino blanco YLLERA 5.5.

Después de trianear y de estar en buena compañía y de pasar un fantástico almuerzo, uno ya no se acuerda del frío y no sabe si es otoño, primavera, veroño o meroño… Porque en Sevilla en otoño lo mismo te puedes encontrar a uno en chanclas y calzonas, que a uno con plumífero y cuello vuelto abrigado hasta las cejas.

[foogallery id=»1083″]

 

 

Vota para darnos tu apoyo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *